TRANSGENICOS....UNA AMENAZA
El peligro de los alimentos transgénicos
Transgénicos, 4 consecuencias negativas de su liberación en nuestro MUNDO.
1.-Los trangénicos enriquecen a las empresas transnacionales.
La manipulación genética en el mundo vegetal.
En tres años (1995 - 1998), las ventas de semillas transgénicas en el mundo aumentó en un 2000%. Esto concentra el poder económico en pocas empresas transnacionales que monopolizan la producción de semillas, desplazan la agricultura orgánica, controlan el precio de los alimentos y eliminan a los campesinos e indígenas de la producción agropecuaria tradicional, para mantener la competitividad se deben adquirir dichas semillas las que no pueden ser almacenadas, pues son estériles, lo que garantiza la compra de semilla cada año, de esta manera los agricultores dependen de las semillas producidas por las transnacionales, con esto los pequeños agricultores sin acceso a estas semillas se hacen mas pobres debido a la imposibilidad de competir comercialmente con sus productos tradicionales.
2.-Transgénicos producen dependencia de los herbicidas e insecticidas.
Existen transgénicos que crean sus propias defensas agregándoles un gen tóxico de otro ser vivo. El supuesto objetivo es reducir la necesidad de agroquímicos, pero de hecho a ocasionado el incremento de tales químicos, debido a que estos, por estar presente toda la temporada, malezas e insectos desarrollan una resistencia hacia ellos, afectando por igual a cultivos transgénicos y tradicionales.
3.-Riesgos para la salud.
Los alimentos transgénicos que contienen genes que confieren resistencia a antibióticos pueden provocar la transferencia de esta característica hacia bacterias existentes en el organismo humano, causando una amenaza para la salud pública. Alergias alimenticias pueden aparecer como consecuencia de la introducción de un gen extraño en los alimentos a los que se les han transferido nuevas proteínas, mientras que sustancia tóxicas existentes en cantidades inofensivas en los alimentos, pueden potenciar sus efectos.
4.-Pérdida de la biodiversidad genética.
Las semillas creadas genéticamente eliminan a las naturales, ya que las contaminan genéticamente por medio de la polinización o el viento, mezclándose con vegetales naturales, creando especies estériles o débiles, o que contienen características de los transgénicos, que son más vulnerables a plagas o enfermedades. La contaminación genética es irreversible. Por otro lado, los cultivos transgénicos uniforman genéticamente la agricultura, y además se pueden generar supermalezas que destruyen otras plantas y animales, acelerando la erosión genética ya que se reducirán las posibilidades de adaptación de las plantas cultivadas a las variaciones climáticas y a la diversidad de los ecosistemas. Todo esto contribuye a la pérdida de la biodiversidad.
COMERCIO JUSCO??
para quien??
Los países que van a la cabeza de la industrialización, especialmente Estados Unidos, Japón y los de la Comunidad Económica Europea, en vez de plantearse las causas profundas de la explotación de la Naturaleza, de las minorías y del Tercer Mundo, de las enfermedades de la civilización, del rearme encubierto de las superpotencias y de la llamada hipoteca ecológica (desertificación, desaparición de la capa de ozono, muerte del bosque europeo...), en vez de corregir en su origen las causas sociales y políticas de todo esto, pretenden acelerar la tercera revolución industrial a través de nuevas tecnologías. Sus tres grandes bloques: informática y microtecnología, tecnología genética, y medicina analítica y de transplantes, son para Occidente la panacea, la lámpara de Aladino que ha de superar todos nuestros problemas. Esto explica su repentina moda y el hecho de que en los medios de comunicación tradicionales solo se nos expongan sus ventajas. Nuestro país no es una excepción a esta regla. También aquí los tecnócratas y los grupos económicos de presión han decidido ya que debemos convertirnos en un país de alta tecnología.
La manipulación genética en el mundo vegetal.
2.-Transgénicos producen dependencia de los herbicidas e insecticidas.
3.-Riesgos para la salud.
4.-Pérdida de la biodiversidad genética.
Ahora la operación consiste en vender a través de los medios de comunicación las pretendidas ventajas del nuevo modelo, silenciando los riesgos que dichas tecnologías comportan. Se nos propone una «biotopía», una verdadera utopía genética. Por ello es necesario desvelar el impacto de las nuevas tecnologías e informar sobre sus consecuencias sociales, ambientales y militares, y para comenzar hemos elegido una de las tecnologías más polémicas: la ingeniería genética o biotecnología. Los partidarios de la manipulación genética creen que la mayoría de los graves problemas que afectan a nuestra sociedad, desde el cáncer y el Sida a las malformaciones genéticas, y desde el hambre del Tercer Mundo a los problemas de contaminación, pueden ser superados con dicha tecnología: se habla incluso del «Octavo día de la Creación», de la posibilidad absoluta de diseñar cualquier ser vivo de acuerdo con las necesidades de la industria y el consumo. El mundo feliz predicho por Huxley parece avecinarse revolucionando la agricultura, la medicina, la alimentación, la técnica militar y la genética humana.
Peligro biológico: Terminator
Con el nombre de tecnología Terminator se conoce la manipulación genética de plantas para que sus semillas sean estériles. La tecnología Terminator -llamada también Sistema de Protección de la Tecnología, o TPS por sus siglas en inglés o Tecnología de Restricción del Uso Genético (TRUG)-, fue desarrollada para evitar que los agricultores guardaran y resembraran las semillas cosechadas. En la actualidad todas las grandes multinacionales de ingeniería genética están desarrollando este tipo de tecnología, y aunque Terminator no se comercializa aún, ni hay ensayos de campo, ya se han llevado a cabo pruebas experimentales en invernaderos estadounidenses y se están tramitando más de 30 patentes en diferentes países, incluido el nuestro.
La tecnología Terminator ha sido condenada en todo el mundo debido a sus graves repercusiones para los agricultores, los pueblos indígenas, la biodiversidad y la seguridad alimentaria. Su único objetivo es maximizar las ganancias de la industria, impidiendo que los agricultores utilicen semilla de su propia cosecha para la siembra, sin ninguna contrapartida beneficiosa. Con ello se amenaza no sólo el medio de vida de 1400 millones de campesinos que dependen de sus semillas, sino el mantenimiento de la enorme diversidad de variedades agrícolas conservadas en los campos de los agricultores y fundamentales para la producción mundial de alimentos.